martes, 14 de junio de 2016

Siete canoas.

Siete canoas.
Una a una ordenadamente  salen del puerto formando hilera.
Esa tarde los remeros entrenan fuerte mientras
el sol los ilumina.
Una gaviota planea sobre el agua,dos pequeños gorriones
atraviesan la rígida reja negra que nos separa de la dársena .
Los pequeños botes se deslizan veloces sobre el agua,
empujados por los remos que al unísono marcan el ritmo
del entrenamiento.
Un bote negro de goma a motor los acompaña,
siendo este la ultima conexión con la tierra firme.
Allá a lo lejos junto a la escollera sur antes de entrar al puerto
Los lobos marinos observan cansados el entrenamiento.
La ciudad ignorante de tanto esfuerzo, junto a este calmo mar,
descansa.
Mar del plata 22 de Mayo 2015.Ali.-

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Era verano.

 Entonces era verano lo que hacia que pudiéramos estar mas distendidos y que las flores y los pájaros alegraran nuestras vidas. El mar nos r...