El tiempo sigue ignorante su camino,
no repara en penas y alegrías,
no tiene en cuenta la lluvia o el sol,
no escucha ninguna melodía,
ni es capaz de pintar nuevos colores,
simplemente devora los días.
Y a cada uno le basta su siembra,
así mientras transcurre el tiempo
la gente hace sus días, bailando, riendo,
llorando, ganando o perdiendo.
Mientras el tiempo ignorante de todo,
sin más continua.
No sabe de que avergonzarse,
ni de la vida, ni de la muerte que seguía.
Y así mientras algo concluye
nada del todo se termina.
Buenos Aires, 29-06-15,Ali.
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