Muchas veces, correr tras los relojes
es perder el tiempo,
es caminar por espacios vacíos,
andar sin ton ni son...
y entonces, no llegar a ningún lado.
A veces es mejor caminar despacio,
a paso lento, sin prisa pero sin pausa,
para alcanzar la meta que buscamos,
y tal vez entonces, se pueda ver el instante
que es único y que nunca se repite.
Otras veces, cuando menos te busco,
más te encuentro, y cuando más te busco
no te hallo...
Por eso a veces cuando busco acertar,
luego de recorrer el laberinto, andando,
sin descubrir el rumbo para alcanzar
el cielo que está lejos,
me siento a descansar.
Entonces, surge una estrella
en el horizonte, por la cual camino
iluminada como si siempre hubiera sol...
Por momentos, la realidad no es lo que parece,
un espejismo aparece a lo lejos y debo
distinguir entre luces y sombras
para poder seguir...
Casi siempre, cuando espero no llegas,
y cuando menos deseo, mejor sale aquello
que surge en mi vivir...
Por eso es que no corro por las escaleras,
ni me asomo a la ventana porque si.
Pues el sol llega cada mañana ,
sin que esto dependa de mi...
Bs.As.09-06-2012AluC.G.M.P.Peyrán.-